En el sector inmobiliario no siempre sale todo bien. A veces suceden cosas malas, los contratos fracasan, las tasaciones vuelven con noticias que rompen el trato, se necesita bajar el precio de la venta, el comprador retira la oferta, entre otros problemas.
Cuando esos problemas se presenten, dependerá de tí dar las malas noticias de forma honesta y abierta, de lo contrario destruiras la confianza de tus clientes.
Aquí te daremos algunos consejos para dar malas noticias:
Tips y consejos para dar malas noticias a tus clientes
Usa la situación para mostrar tu valor como agente inmobiliario
Cuando todo sale bien, es fácil lucirse, pero cuando las cosas salen mal, es mucho más difícil. Esta puede ser una gran oportunidad para superar las expectativas de tu cliente y reforzar tu reputación como agente inmobiliario.
Es posible que no puedas decirle a tu cliente lo que ellos quieren escuchar, pero tu forma de decirlo puede cambiar la experiencia de tu cliente.
Mantén la calma y el optimismo
Trata de mantener la calma siempre, incluso si estás estresado, si fracasó un gran contrato para tí o si trabajaste muy duro y recibiste malas noticias.
No permitas que tus clientes te vean con esa frustración y preocupación. Siempre mantente en alto y sé la voz de la razón y fuente de consuelo.
Da las malas noticias lo más antes posible cuando tengas los detalles
Esperar para dar malas noticias no ayuda a nadie y quita tiempo tanto a tu cliente como a tí, podrías hacerle perder otra oportunidad.
Trata de contactarlo lo más rápido posible cuando tengas la información detallada y una clara explicación para responder sus dudas.
Mide tu tono y velocidad al hablar
Las personas estresadas o preocupadas tienden a hablar en un tono alto y más rápido. Esto podría alarmar a los clientes, estresarlos o ponerlos nerviosos, lo que llevará a un camino equivocado.
Antes de hablar, respira profundamente para calmarte un poco. Baja el tono de voz y la velocidad, parecerás más tranquilo y ayudará a los clientes a sentirse mejor.
No uses la frase “malas noticias”
No preocupes a tu cliente de entrada, pero tampoco debes ilusionarlo.
No digas frases negativas de entrada, ponen a tus clientes en una posición defensiva y les baja los ánimos.
En lugar de usar palabras negativas, puedes decir “Tenemos que tomar una decisión” o “Tenemos un desafío que superar”. Esas frases indican que las noticias serán malas, pero que pueden superarlo juntos.
Ese cambio puede llevar a un buen rumbo la conversación y hacerla más positiva.
Se directo y honesto
Si quieres ser positivo y no enredar o dar vueltas a tu cliente, explica todo lo que sabes y evita suposiciones o sacar conclusiones.
Puedes compartir tu visión de la situación y responder todas las preguntas de tu cliente. Si no sabes las respuestas, dile y haga un seguimiento lo más pronto posible.
Sigue adelante
Existen las posibilidades de que tu cliente se sienta frustrado y tenga ganas de renunciar a todo o a tí.
Antes de llamar a tu cliente, prepara algunas ideas para seguir adelante, ofréceles algún plan o alternativas. Muestrales que quieres encontrar una solución y ayudarlo. Trata de no decir lo que no puedes hacer.
Céntrate en lo que tú puedes hacer
No digas las cosas desde un punto de vista negativo.
En lugar de decir “No podemos venderla a ese precio” puedes decir “Este precio nos dará una oportunidad de venderla más rápida”.
Son pequeños cambios de perspectiva, pero da la sensación de oportunidad y esperanza a su cliente.
No dejes que la negatividad se apodere
Al estar dando malas noticias, tus clientes se sentirán mal. Haz lo posible para desviar esa conversación a un buen camino. Haz que se desahoguen y se emocionen en lugar de sumergirse en la negatividad.
Tranquiliza a tus clientes
Mantente agradecido con tus clientes por confiar en tí, por estar comprometidos y prometerles un buen resultado o alternativa.
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Jhely Cruz M.